Desde hace unos meses, en pastelería Cinco20 hemos organizado pláticas y actividades relacionadas con el trabajo en equipo.
Esta proyecto, que está ligado con la misión de la empresa y que busca hacer de nuestros compañeros y socios mejores personas, culminó con una plática motivacional impartida por dos deportistas de 18 años.
Dos jóvenes, dos chavitos: ¿quién los escucha hoy en día? ¿qué pueden aportar? ¿Qué experiencia tienen? Pues en poco menos de una hora, respondieron estas tres preguntas a nuestros compañeros de producción.
Resulta que Sebastián López Cisneros y Diego Hernández han tenido más peso sobre sus hombros que la mayoría de los jóvenes de sus edades: son profesionales en sus respectivos deportes (futbol y beisbol) y enfrentan diferentes grados de presión en su día a día.
Vean si no.
Sebastián es jugador y capitán del equipo de futbol Puebla Sub 18, institución de la que ha formado parte desde los 11 años; por su parte, Diego firmó hace un año con los Yankees de Nueva York y actualmente entrena en la liga de prospectos del equipo, en República Dominicana.
El pelotero explicó las dificultades de vivir lejos de casa, de enfrentar las diferentes personalidades de cada jugador y de la importancia saberse comunicar con sus compañeros para resolver y prevenir conflictos.
“Estoy en una organización donde hay jugadores de diferentes
nacionalidades. A veces cuesta mucho trabajo ver cómo un jugador de tu propio país intenta competir contigo.
“Cuando me sucedió, decidí hablar con mi paisano y decirle que tenemos que hacer equipo y ayudarnos entre nosotros para alcanzar las metas.
“De poco sirve ser muy bueno en el campo si eres arrogante y no cooperas con el resto del equipo”, precisó Diego.
Sebastián, quien fue parte del equipo de Puebla campeón Sub 17 en 2020, señaló la importancia de cada integrante del equipo, y que si uno de ellos falla o no hace su trabajo al 100 por ciento, repercute en el resultado final de la organización.
“Todos somos importantes en el equipo: utilero, preparador físico, técnico, doctor, psicólogo… en un equipo, no hay jerarquías”, afirmó. “La disciplina y el respeto, estar puntual en los entrenamientos, trabajar fuera, las sesiones con la psicóloga… todo esto busca que seamos seres humanos
responsables”.
Diego señaló los valores que cree necesarios para formar parte de un equipo: flexibilidad, claridad en los objetivos y la motivación.
“Si alguien tiene un error, le echas la mano; es importante tener armonía entre los compañeros y motivación para hacer el mejor pastel siempre.
“Si eres un arrogante, no sirves, echas a todos para abajo”, puntualizó el lanzador, quien ha acompañado a Cinco20 en algunos de sus aperturas en la ciudad de Puebla.